El arte da la felicidad y el Karma
“…el principio da la causalidad como una ley natural. Al tratar con la realidad, hay que tener en cuenta esa ley. Así, por ejemplo, en el campo de las experiencias cotidianas, si se producen ciertos acontecimientos indeseables, el mejor método para asegurarse de que no vuelvan a ocurrir es procurar que no se repitan las condiciones que los producen. De modo similar, si quieres tener una experiencia determinada, lo más lógico es buscar y acumular aquellas causas y condiciones que la favorecen.”
“sucede lo mismo con los estados y las experiencias mentales. Si se desea felicidad, se deberían buscar las causas que en otras ocasiones la han producido, y se no desea el sufrimiento, debería procurarse que no vuelvan a presentarse las causas y condiciones que dieran lugar al mismo. Es muy importante aprender a apreciar este principio.”
“Nuestra tarea consiste en examinar la variedad de estados mentales que experimentamos. Necesitamos identificarlos con claridad y clasificarlos en función de que nos conduzcan o no a la felicidad.”
“Por ejemplo, el odio, los celos, la cólera, son nocivos. Los consideramos estados negativos de la mente porque destruyen nuestro bien estar mental; cuando se abrigan sentimientos de animadversión hacia alguien, cuando la persona se siente llena de odio o de emociones negativas, todo nos parece hostil. La consecuencia es más temor, una mayor inhibición e indecisión, una sensación de inseguridad…”
“Yo considero saludable a una persona compasiva, cálida y de corazón bondadoso. Si tienes sentimientos de compasión y deseas ser amable, hay algo que abre automáticamente tu puerta interior y puedes comunicarte mucho más fácilmente con otras personas. Ese sentimiento de cordialidad ayuda a abrirse a los demás. Se descubre entonces que todos los seres humanos son como uno mismo, de modo que puedes relacionarte más fácilmente con ellos. Eso genera un espirito de amistad. Entonces hay menos necesidad de ocultar las cosas y, como resultado, desaparecen los sentimientos de temor, las dudas sobre uno mismo y la inseguridad. Eso inspira también confianza en torno a ti…”
“En cualquier caso creo que cultivar los estados mentales positivos, como la amabilidad y la compasión, conduce decididamente a una mejor salud psicológica y a la felicidad.
“…hay que utilizar una variedad de enfoques y métodos, superar los variados y complejos estados negativos…no podrás conseguirlo practicando una técnica una o dos veces. El cambio requiere tiempo. Hasta el cambio físico lo exige, necesita tiempo para adaptarse. Hay muchos rasgos mentales negativos, de modo que afrontarlos y contraatacar no es fácil. Requiere la reiterada aplicación de diversas técnicas y tomarse el tiempo necesario para familiarizarse con ellas. Se trata de un proceso de aprendizaje. Hay que entrenar.”
Não é algo exclusivo do Budismo, nem sequer do oriente. Certamente não se aplica a todos, pois as naturezas de cada um são muito diferentes. Mas, basicamente é algo com que me identifico.
É algo básico, simples e prático. Positivo. Mas nem sempre fácil. Nada fácil.
Dalai Lama con Howard C. Cutler, M.D.
Traducción de José Manuel Pomares